En el silencio de esta noche…mientras mis oídos recogen los acordes melodiosos de los sonidos de la flauta a lo lejos,
me surge escribir desde mi interior, una vez más pero como hace tiempo no lo hacía.
Esta vez plasmando mi más profundo sentir entre la brisa tibia de verano que aparece sorprendiéndome de a ratitos desde mi balcón.
Hoy la noche me abrazo, porque así lo sintió…como muchas veces he querido. Sentir ese abrazo que acaricia el alma…
Hoy tuve mi regalo, ese regalo tan ansiado por mí, pero vino desde más allá y de lo misterioso y profundo que puede ser el interior de mi propio ser.
Hoy mi alma habla para regalarme mi mayor tesoro, mi anhelo,
risas transformadas en caricias.
Hoy el regalo de esta pura esencia eligio estar dentro de mí.
Cierro los ojos… escucho los latidos de mi corazón entre la calma de mi propio ser…
Una gota de felicidad en este momento esta vez es para mí. Fue el regalo que recibí, mi gota de felicidad que riega mi alma. Alma que una vez más floreció para comprender poco a poco el camino de la vida misma, sus obstáculos, sus alegrías, sus tristezas…
Hoy comparto contigo si así lo quieres este sentir que es mío, pero también es tuyo si sentís tanto o igual que yo este regalo que no tiene precio, no es material, no es superficial. SOLO ES UN MOMENTO que aparece. Si sabes ver con los ojos del alma y el corazón, sabrás de que se trata y si es para ti.
Es solamente un estado,
porque la felicidad no se mide.
Simplemente ES y se MANIFIESTA…
Sol
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